La Fundación Antonio Núñez Jiménez de la Naturaleza y el Hombre (FANJ) prepara su participación para el Foro de la Sociedad Civil y Actores Sociales, que se realizará los días 8, 9 y 10 de abril en el marco de la VII Cumbre de las Américas. La FANJ estará representada por su presidenta, Liliana Núñez Velis, y el sociólogo e historiador Fernando Martínez Heredia, titular de los investigadores asociados de esta Fundación. Participarán en dos grupos de trabajo del Foro: el que se ocupara de los temas Energía, Desarrollo Sostenible y Medio Ambiente, y el Foro de Gobernabilidad.

Esta VII Cumbre de las Américas, de singular importancia por marcar el retorno de Cuba a la mesa de discusión de los Estados del continente, es parejamente un espacio para que los movimientos sociales, ONG´s  y personalidades de la sociedad civil puedan manifestar sus proyecciones y experiencias. Para Cuba, que hasta hoy vio cerradas estas puertas, como para el conclave mismo que rectifica su proceder, se trata de un verdadero hito. Consideramos desde la FANJ que es un momento importante en el contexto regional que la Sociedad Civil cubana que trabaja en Cuba actualmente y con un historial de años de resultados muy concretos,  pueda asistir y tener voz.

Valoramos esta Cumbre como un evento histórico, valioso, del que debemos formar parte. Sin embargo, las últimas noticias y auncios de asistencia de personas que éticamente no tienen nuestro respeto, hacen que disminuya la confianza y la certeza de encontrar una atmósfera de diálogo constructivo. Puede convertirse en un escenario nacido ya con conflictos irremediables donde los valores éticos, más que los políticos pesarán, y mucho.

No debieran repetirse los mismos viejos errores que nos han obligado  a la imposibilidad de un diálogo. Ante nuevos escenarios, debiera igualmente promoverse una propuesta nueva, fresca, y novedosa, a la altura de los momentos que pide nuestro continente:  la tozudez y la falta de innovación, más la falta de un filtro ético, puede atentar contra la creación de un espacio para el dialogo en un momento histórico que no debiera ser ensombrecido por voces mercenarias,  y contrarias a una atmósfera de confianza y diálogo constructivo.

Nuestra aspiración, que esperamos sea también la de las restantes representaciones de la sociedad civil, empeñadas en la misma vocación constructiva de la PAZ LATINOAMERICANA, la cual el Mundo de hoy necesita como realización y como ejemplo, es que podamos despojarnos  de cuanto obstaculiza las posibilidades de unir auténticos esfuerzos en la dirección deseada. Y para lograrlo, comenzar por intercambiar con  transparencia los resultados de experiencias, errores, y desafíos propios y generalizados, sin el obstáculo de deslices éticos que se dirijan a impedir estos objetivos.

Consideramos importante asistir a zonas de diálogo que reflejan la complejidad y riqueza de la realidad cubana, donde se reflejan los espacios de incidencia de variados actores, con mayor o menor credibilidad, pero que existen y forman parte de un escenario que no se puede ignorar, aun cuando no se compartan ni las ideas, ni los caminos para hacerlas realidad. Apostamos por participar en este nuevo foro con el propósito de darnos a conocer con el trabajo ambiental, cultural y científico que hemos desarrollado en los últimos 20 años. Al compartir nuestras experiencias prácticas, donde podemos coincidir con el gobierno en algunos puntos sobre el manejo de los temas ambientales, y en otros no, pero donde lo importante es la experiencia en haber encontrado el camino para decir, e influir, con resultados exitosos de nuestras posturas en el manejo ambiental. No han sido pocos los tropiezos, y lo siguen siendo, pero el resumen es que hemos logrado incidir en muchos puntos en que consideramos valioso nuestro aporte o visión, para avanzar en el camino hacia una cultura de la naturaleza en Cuba y la región. Se abren así nuevas puertas, se plantean nuevos retos y se hace necesario identificar nuevas responsabilidades.

Hay un precepto bíblico que dice “Allí donde nacieras, es preciso florecer” y del amor al trabajo en Cuba y desde Cuba, es de lo que queremos hablar en  nuestra participación en esta Cumbre, y escuchar al resto de las ONG´s del continente.

Agradecemos el intento de incorporación a nuevos espacios porque hay una historia de trabajo que queremos compartir y aprender de otros, y sólo será posible entre personas y organizaciones afines éticamente.