Sociedad civil cubana aborda retos de gobernabilidad y participación ciudadana
Los retos para el perfeccionamiento del sistema político y económico cubano, así como las garantías en el ejercicio integral de los derechos humanos, centran este martes los debates de un variado grupo de representantes de organismos, instituciones y proyectos no gubernamentales de todo el país.
Las discusiones forman parte del grupo de trabajo sobre Gobernabilidad democrática y Participación ciudadana, dos de los ocho temas que nutren el Foro de la Sociedad Civil Cubana Pensando Américas, que tiene como sedes la Casa del Alba y la Casa de las Américas de esta capital.
El objetivo del evento es recoger opiniones y propuestas de cara a la próxima Cumbre de las Américas que se celebrará en abril en Panamá, donde se prevé por primera vez la asistencia de Cuba y que tendrá un foro específico dedicado a estos temas.
José Alexis Ginarte, miembro de la Unión Nacional de Juristas de Cuba, abordó las garantías recogidas en las legislaciones de nuestro país, en especial la constitución socialista de 1976, para el ejercicio de todos los derechos humanos.
Precisó que la Carta Magna establece que todo el poder emana del pueblo y que el gobierno cumple su voluntad.
Orlando Gutiérrez, delegado provincial del Poder Popular, llamó a respetar el sistema político que hemos escogido los cubanos y el cual estamos dispuestos a perfeccionar sin ningún tipo de presiones ni exigencias externas.
Asimismo, afirmó que el hermano pueblo de Venezuela tiene derecho también a seguir su propio camino sin estar sometido a las agresiones imperialistas.
Gutiérrez abordó su caso particular y dijo que el hecho de ser Babalao, Abacuá y Palero, tres prácticas religiosas de origen africano, no ha limitado su participación en el sistema político de nuestro país.
Luis Ernesto Quesada, del capítulo cubano de la Red de Defensa de la Humanidad, precisó que el concepto de sociedad civil fue pensado para otros sistemas políticos y ha estado también sujeto a manipulaciones.
Respecto a la Cumbre que se avecina, aseguró que no debemos tener miedo de mostrar que nuestra sociedad es diferente, única en América Latina, por lo que nuestra sociedad civil también es diferente y válida.
Mónica Baró, del Instituto de Filosofía, dijo que no se trata de ofrecer una visión en “blanco y negro” de nuestra sociedad, porque se pierde toda credibilidad.
Lo importante, añadió, es que dentro de esas contradicciones y contrastes, seguimos apostando por un proyecto socialista y revolucionario.
En ese mismo sentido se pronunció la presidenta de la Asociación Cubana de Comunicadores Sociales, Rosa María Pérez, quien dijo que era mejor abordar nuestras debilidades que dejar que otros las manipularan. “La sociedad cubana está abierta y en perfeccionamiento”, concluyó.
Gisela Duarte, del Secretariado Nacional de la CTC, expuso las garantías de los trabajadores cubanos en todas las formas de propiedad que están establecidas.
Asimismo, dijo que los debates a lo largo de todo el país sobre la Ley de Seguridad Social y el Código del Trabajo, son muestras de la participación de los ciudadanos en todas las decisiones, en especial de los trabajadores y los sindicatos, que fueron protagonistas de ese proceso.
Lisset González García, de la Federación de Mujeres Cubanas, se refirió a los derechos conquistados por las mujeres tras el triunfo de la Revolución, pero dijo que todavía queda mucho por hacer para cambiar las matrices culturales heredadas.
En este aspecto, Herminia Rodríguez, de la Federación de Mujeres Cubanas, propuso que se llevara a Panamá la iniciativa de incluir en el documento final un llamado a que las mujeres reciban igual salario, por igual trabajo, algo que es una realidad en nuestro país pero que constituye un grave problema para nuestro hemisferio, incluso en las naciones desarrolladas.
Tomado de Granma