EEUU emplea la política de DDHH como pretexto para su injerencia en otros países, dijo el presidente de Bolivia, Evo Morales.
“Ahora el imperio norteamericano usa los derechos humanos para invadir”, dijo Morales a la cadena RT y continuó: “¿Qué moral tiene Obama para hablar de los derechos humanos? En algunos estados de Estados Unidos hay pena de muerte, cosa que no tenemos en ningún país latinoamericano”.Además hizo referencia al elevado número de muertes por la policía en EEUU, diciendo que en el país “hay no sé cuántos muertos a bala, no se respetan no solamente los derechos humanos, sino tampoco los colectivos”.En Bolivia, comparó, hay un respeto a los derechos colectivos y los servicios básicos son un derecho humano.

Refiriéndose a la situación en Ucrania, el mandatario boliviano dijo que “la nueva política antirrusa de Estados Unidos es con expansión militar, injerencia” en Europa.

Lo que Europa tiene que resolver, a juicio de Morales, es “no tener ninguna injerencia ni intervención milita”

“Saludamos la lucha por su bien y soberanía de Rusia, entendemos perfectamente las diferencias en Ucrania pero son los pueblos los que piensan y hay que respaldar lo que piensan los pueblos y no se trata de imponer por intereses de carácter geopolítico”, zanjó el mandatario.

EEUU, gobernado por banqueros y transnacionales

“En EEUU no gobiernan los presidentes supuestamente electos con el voto norteamericano, el voto del pueblo de EEUU. Allí los que gobiernan son los banqueros y las transnacionales”, resaltó Morales.

Al comentar las próximas elecciones presidenciales en EEUU, previstas para el noviembre del año que viene, expresó que “a lo mejor deberían elegir a un banquero para que ese banquero designe a un presidente”.

Morales agregó que la situación en el país no cambiará con un nuevo presidente, como demuestra el caso de Barack Obama.

“Un afroamericano de presidente no cambió nada. Yo, por lo menos, pensé que un presidente que viene de un sector social discriminado, marginado, agobiado, vilipendiado como los afroamericanos, y yo, un presidente que viene de los movimientos indígenas, también históricamente amenazados a la extinción, nos podíamos entender para el bien de todos”, lamentó.

En cuanto al inicio de normalización de las relaciones de EEUU y Cuba, dijo que “no es un regalo de Obama, sino de la unidad del pueblo cubano y la solidaridad del mundo entero sobre Cuba”.

Tomado de Contrainjerencia