Con acto por reforma agraria abre penúltimo día de caravana #Lula por #Brasil

Mar 27, 2018

Con un acto por la reforma agraria en la localidad fronteriza de Foz de Iguasú comenzará este martes el penúltimo día de la cuarta etapa del proyecto Lula por Brasil, que recorre tres estados del sur del país.

Inmediatamente después, la caravana seguirá hacia Laranjeiras do Sul, donde el fundador del Partido de los Trabajadores (PT) visitará el campus de la Universidad Federal de la Frontera Sur (UFFS) y los laboratorios de agronomía.

Con posterioridad, Lula y su comitiva sostendrán un encuentro en el Asentamiento 8 de junio, del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST).

La cuarta etapa de la caravana Lula por Brasil finalizará el 28 de marzo en Curitiba, la capital paranaense, donde según advirtió la víspera el propio exdignatario con seguridad 'habrá confusión'.

Nosotros somos gente de paz; queremos que las personas, con independencia del partido político al cual pertenecen, discutan sobre el país que quieren; pero no vamos a aceptar que nos maltraten, subrayó Lula después de rememorar los ataques sufridos en los últimos días por lo que llamó 'un bando de 40 ó 50 fascistas'.

Al intervenir ayer en un seminario internacional en Foz de Iguasú, el líder histórico del PT relató las múltiples tentativas de obstruir el avance de la caravana y las agresiones de que fueron víctima tanto participantes del proyecto como seguidores del expresidente que quisieron acompañar los actos a los cuales este asistiría.

En la ciudad de Chapecó trataron de impedir el aterrizaje del avión donde viajábamos y luego permanecieron el día entero fuera del hotel provocando, e incluso intentaron invadir la instalación, dijo.

También la víspera, en entrevista concedida a la radio Onda Sul, de la ciudad de Francisco Beltrao, en Paraná, Lula manifestó su esperanza en que ese tipo de cosas no se repitan durante las próximas elecciones.

'Espero que cuando llegue el auge de la campaña las personas estén más civilizadas', apuntó el expresidente, quien subrayó que a pesar de los episodios de agresiones y violencia por parte de un reducido grupo de fascistas, el pueblo los recibió con cariño.

Lula insistió en que es normal que la gente proteste y recordó que él pasó la vida protestando; mas, lo que no se puede es ser irresponsable y apedrear un ómnibus.

Ayer, comentó, una piedra casi quiebra el parabrisas del ómnibus en que viajamos, y si llega a darle al chofer éste podría haber perdido el control del vehículo y ocurrir una cosa más grave, alertó.

Los ataques contra la caravana de Lula comenzaron en Río Grande do Sul, la primera de las entidades federativas visitadas, y fueron oportunamente denunciados por la bancada del PT en la Cámara de Diputados, que los consideró 'actos fascistas de la derecha agraria' de ese estado.

La violencia llegó a su extremo en Passo Fundo, donde la avenida de acceso a la ciudad fue bloqueada y ómnibus de pasajeros apedreados por la turba fascista, creyendo estar delante de la delegación del ex gobernante, acotó la declaración petista.

El texto concluyó denunciando la profundización de la ruptura de la democracia en Brasil, un proceso compuesto por una serie de medidas de excepción adoptadas ante la omisión - y de la complicidad, en muchos casos - del Estado frente a la violencia política creciente contra la izquierda en general y el PT en particular. (Pensando Américas-Prensa Latina)