Por Agustín Palermo *
El imperio ha estado acostumbrado a controlar, dominar, invadir y saquear a cuanto país desee, pero con Cuba no ha podido ni podrá; contra esa pequeña isla de once millones de habitantes ha fracasado. Razón tenía Fidel cuando dijo que “si a David se le recuerda porque luchó contra Goliat, a los cubanos, que constituimos un David mucho más pequeño, contra un Goliat mucho más grande, se nos tendrá que recordar tanto como se recuerda a David”.