2 de junio, 2016
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, consideró que la reciente destitución de su colega brasileña Dilma Rousseff a manos del Senado, para someterla a un juicio político, sienta un precedente funesto para la región.
Lo que está sucediendo en Brasil es un precedente funesto, aseveró el mandatario durante una entrevista que concedió en su casa a la televisora pública EcuadorTV, y que concluyó al filo de la medianoche, reporta Prensa Latina.