Un estudio mostró que el principal incentivo de los adultos mayores latinoamericanos para seguir trabajando, cumplida la edad legal, es mantener un ingreso.
El 57,7% de las personas de entre 65 y 69 años, y un 51,8% de aquellas con 70 y más, no perciben una pensión de un sistema contributivo, con tasas aún más elevadas para las mujeres.
Lo documenta una nueva publicación conjunta de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y de la Comisión Económica Para América Latina y el Caribe (Cepal).