América Latina y el Caribe deben emplear técnicas de producción sostenibles para preservar suelos saludables, los que constituyen la base de la agricultura, la producción de alimentos y la lucha contra el hambre.
"Mantener suelos sanos significa poder tener producción de alimentos. Si uno no tiene suelos adecuados, la producción de alimentos se empobrece, se dificulta, se encarece", afirmó Raúl Benítez, director regional de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).