¿Se congeló la apertura Venezuela-EEUU? Perspectivas y amenazas

Abr 04, 2022

Por: Marcos Salgado

Hace pocas semanas, cuando comenzaba la ofensiva rusa en Ucrania, sorprendió a propios y ajenos la reunión que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, mantuvo en el Palacio de Miraflores con representantes de primer nivel del gobierno estadounidense, donde se habló, entre otras cosas, de petróleo venezolano para suplir el faltante de petróleo ruso en Estados Unidos.

Algo que era impensable pocos días antes, estaba sobre la mesa de una negociación directa también impensada. Eran los primeros reacomodos de un escenario internacional de máxima tensión, que se sabe no cambiará en el corto plazo.

Más allá del devenir del conflicto en el terreno, en Ucrania, donde ya las partes negocian un alto el fuego con aparentes buenas perspectivas, Estados Unidos y Europa tienen que buscar cómo reemplazar las importaciones rusas y todo indica que van a mantener las sanciones a largo plazo.

Ahí aparece Venezuela, con la principal reserva mundial probada de petróleo y la octava reserva de gas natural. El presidente Maduro ya dijo que le vendería petróleo a Estados Unidos, pero enseguida se aclararon los límites: Estados Unidos tiene que al menos aliviar las sanciones sobre Venezuela, y tiene que reconocer a Nicolás Maduro como presidente.

Y aunque en el nivel político el asunto quedó ahí, se sabe que los contactos continuaron y que hay empresas estadounidenses en Caracas negociando los términos de una participación.

Según el Wall Street Journal, la petrolera Chevron viene insistiendo en la Casa Blanca que ellos están listos para duplicar la producción de crudo venezolano en pocos meses. Esa producción está ahora en unos 800 mil barriles diarios. Lo que Estados Unidos importaba de Rusia eran alrededor de 700 mil barriles diarios.

A pesar del aparente parate, ninguna de las dos partes dieron por cerrada la negociación. El gobierno de Venezuela en tanto siguió apuntalando su alianza política con Rusia. Acuñada por el comandante Chávez, son acuerdos políticos, pero también comerciales y hasta militares.

Mientras se abría el compás de espera entre Caracas y Washington, el número dos del chavismo, Diosdado Cabello, dijo que a Rusia le tocaba por segunda vez en la historia derrotar al nazismo y brindó apoyo total. También la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, se reunió en Turquía con su par ruso, Serguei Lavrov.

Y hasta se vio al embajador de Rusia en Venezuela acompañando a diputados del PSUV en la inauguración de una cancha y un mural con las imágenes de Putin y Chávez en Catia, una zona popular de Caracas. Es decir: negociaciones sí, posible venta de petróleo también, pero sin ceder posiciones políticas.