Raíces de una visita.

Mar 16, 2016

16 de marzo, 2016 

Por Pedro Pablo Gómez

Los medios de comunicación a escala internacional están llenos de comentarios a favor, o en contra y también neutrales acerca de la próxima visita del presidente de los Estados Unidos de América a la isla de Cuba, por las lógicas derivaciones que tendría en el proceso de normalización de las relaciones bilaterales entre ambos estados soberanos.

Para mi criterio es un paso de avance dado por Barack Obama en su consecuente política de modificar esta en la forma de tratar de cambiar la dirección del gobierno cubano en su función de país socialista dentro del hemisferio occidental y lograr imponer sus criterios sobre el establecimiento de la ‘’democracia’’ en base a sus intereses. Está claro se modifica la táctica, pero permanece la estrategia.

Cuba ha mantenido sus principios desde el comienzo de las relaciones diplomáticas, manifestados de forma reiterada por su presidente, Raúl Castro, y por los representantes de nuestro país en las conversaciones sostenidas a este respecto, en cuanto a que la normalización pasa porque EEUU cumpla con los requerimientos de Cese del bloqueo, la Devolución del territorio ocupado en la provincia de Guantánamo y el Cese de las actividades de agresión a nuestro país en su más amplio espectro.

Estamos preparados para recibir de forma adecuada al señor presidente norteamericano, con el respeto y acogida propios de nuestro pueblo. En la visita él podrá tener una visión directa de la voluntad manifiesta de nuestra población, que tratarán de empañar con sus mercenarios dentro del país.

No es de desdeñar la situación que tenía el gigante norteño cuando se decidieron a cambiar la táctica sobre Cuba, confrontaban una crisis de presencia en la región considerada por ellos como su traspatio seguro, con una Revolución establecida y un proceso avanzado de unidad en el continente, crítico de su posición, y de solidaridad con la causa cubana. Así se vieron precisados a dar el golpe de timón tratando de contrarrestar los procesos que avanzaban en las tierras americanas.

Después de la Cumbre de las Américas y del éxito en la Cumbre de la CELAC en Cuba donde se declaro a Nuestra América como Zona de Paz, se dio una aceleración en los planes de EEUU para recuperar fuerzas en la región, de esta forma se incrementó la tensión en la asediada Venezuela, y se vieron los avances de acciones de organizaciones de derecha en los distintos países donde se desarrollaban gobiernos de tendencia progresista como Ecuador, Bolivia, Brasil, hasta un nuevo surgimiento de una supuesta guerrilla en Nicaragua. Mientras, tratan de dar una impresión màs favorable en la marcha de la relación con Cuba, aunque las transformaciones radicales de su política están todavía por realizar.

Para los analistas de la política internacional no pasa inadvertido que mientras negocian con Cuba, por otro lado aprietan en su política agresiva con los demás que han tenido una actitud de cambio y progreso contraria a sus intereses en el continente. De esta forma, intentan confundir a nuestros hermanos latinoamericanos presentando el camino tomado por Cuba, en el que como afirmara nuestro gobierno el socialismo y el antiimperialismo son irrenunciables, como parte de sus victorias cuando esta es el resultado de la resistencia cubana y del respaldo de los pueblos y gobiernos latinoamericanos.