22 de junio, 2016

Los países latinoamericanos y caribeños apoyaron, durante la sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), el proceso de diálogo que se desarrolla en Vene­zuela y lo vieron como una vía para que se respete la soberanía y la no intervención extranjera en el país.

Según el sitio de la Cancillería venezolana, el embajador de Nicaragua, Denis Moncada; y el de Antigua y Barbuda, Ronald Sanders, expresaron que el pueblo venezolano en uso de su soberanía es quien debe tener la última palabra y que la iniciativa de diálogo cuenta con su apoyo.

Asimismo el representante de Ecuador, Mar­co Vinicio Albuja, apoyó la iniciativa dirigida por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y los expresidentes de España, José Luis Ro­dríguez Zapatero; de República Do­minicana, Leonel Fernández; y de Panamá, Martín Torrijos.

La delegación de Bolivia en la OEA expresó que el diálogo es el camino hacia el respeto de la soberanía y la autodeterminación venezolana; en ese contexto, expresaron su apoyo a la iniciativa desarrollada por la Unasur.

Durante la reunión la delegación de Argentina en la OEA propuso la conformación de grupo amigo del Consejo Permanente de la Organización para que acompañe y apoye la tarea de los tres expresidentes.

El expresidente de España, José Luis Rodrí­guez  Zapatero (2004–2011), destacó por su par­te que el objetivo de la búsqueda del diálogo es ayudar a Venezuela desde el profundo respeto a su soberanía, en contra de toda injerencia.

En su exposición, el político español expresó que la tarea de mediación que adelantan los exmandatarios se produce con plena imparcialidad y que están trabajando en esta fase de exploración para construir los pilares de un diálogo sólido y consistente.

Detalló además que desde el 19 de mayo se han realizado 20 reuniones con el Gobierno y la oposición en Caracas y República Dominicana.

En la sesión extraordinaria, señaló que espera que se pueda tener en fechas razonables una confirmación del inicio activo del diálogo y resaltó que la reconciliación es una tarea imprescindible y es el principio del camino.

El exmandatario europeo presentó ante el Consejo Permanente de la OEA una reseña del diálogo que promueve entre el Gobierno de Venezuela y la oposición.

“Estamos en la fase de exploración para construir pilares de un diálogo sólido y consistente; no hemos perdido el tiempo, hemos hecho un esfuerzo constante, que espero pueda tener en fechas razonables una confirmación, una reválida en el inicio activo del diálogo”, dijo.
Zapatero incluyó también en su propuesta de agenda la búsqueda de la reconciliación.

En otro momento señaló que el diálogo debía “abordar algunos de los principales y serios problemas económicos que tiene Vene­zuela”.
telesur detalla que la asamblea solicitada por el país sudamericano se desarrolla antes de la sesión convocada el 23 de junio para debatir si la OEA aplica a Venezuela, a solicitud de su secretario general, Luis Almagro, la Carta De­mo­crática.

Como parte de sus acciones injerencistas, la máxima autoridad del organismo señaló esta reunión como “un paso que ojalá pueda agregar valor a la reunión del 23, en el sentido de que los expresidentes brinden información nueva acerca del progreso que han hecho”.

El pasado 15 de junio, la OEA aprobó la solicitud del país sudamericano para que se respete la institucionalidad del organismo por parte de Almagro.

La propuesta fue aprobada con 19 votos a favor, 12 en contra, dos abstenciones y una ausencia durante la 46 Asamblea General de la OEA, que inició el 13 de junio y concluyó dos días después.

El pasado 7 de junio, la oposición venezolana faltó sin explicar los motivos a las reuniones exploratorias en República Dominicana con la delegación del Gobierno y representantes internacionales que hacen seguimiento al proceso de entendimiento.

Representantes del Gobierno de Vene­zuela y de la oposición realizaron el 27 de mayo una reunión exploratoria en República Dominicana para establecer un diálogo y acordar la paz, el respeto a la soberanía nacional, la Constitución y el bienestar del pueblo.

(De Granma)