Las primicias de Barack Obama

Mar 21, 2016

 21 de Marzo,  2016

Por Carlos Alejandro Rodríguez Martínez

 Después de alzarse con el título de primer presidente afronorteamericano electo en los Estados Unidos, Barack Obama también entrará a la historia como el primero en visitar la Cuba revolucionaria. Y es, de manera efectiva, el primero de la nación norteña en propiciar el acercamiento entre el gobierno de su país y la dirección histórica de la Revolución Cubana.

Hace poco tiempo el cuadragésimo cuarto presidente de los Estados Unidos también pasó a los anales de su país por ser —otra vez— el primer dignatario en apoyar abiertamente a las personas LGBT (lesbianas, gais, bisexuales y transexuales). Ha sido el primero en defender —y alcanzar— la ley federal del matrimonio igualitario entre parejas del mismo sexo; y el primero en posar para una revista gay, gesto cumbre de su apoyo al derecho pleno de las personas no heterosexuales.

Como si fuera poco, la administración Obama también tradujo sus medidas internas de aceptación sexual en una nueva política de proyección internacional: a estas alturas la Casa Blanca ya nombró a seis embajadores abiertamente gais o lesbianas en varios países del orbe.

«El presidente Obama es, sin duda, el más amable a la comunidad LGBT que ha tenido este país», reconoció en entrevista exclusiva para Vanguardia el periodista norteamericano Michael Lavers, editor de temas internacionales de The Washington Blade, el semanario LGBT más antiguo de los Estados Unidos.

«La administración Obama también ha tomado acciones ejecutivas para proteger a los trabajadores federales y a los que laboran en compañías que tienen contractos con el gobierno federal», explicó más adelante Lavers. De hecho, en su primer mandato Barack Obama logró derogar la polémica ley Don´t tell, don´t ask(No digas, no preguntes) que prohibía a las personas abiertamente homosexuales formar parte de las Fuerzas Armadas. En el mismo sentido, «el proceso de permitir a los militares trans servir al ejército ya ha empezado», añadió también el periodista norteamericano.

Antes de alcanzar la ley federal que legalizó el matrimonio igualitario en todo el país Obama aseguró públicamente que «las parejas del mismo sexo deberían poder casarse».

Por su apoyo a la comunidad LGBT, Obama también se ha ganado la crítica y la desacreditación mediática de los sectores más conservadores de la política norteamericana y de la iglesia. Según Lavers, en oposición al plan lanzado por el gobierno, «legisladores en varios estados han aprobado una serie de propuestas de libertad religiosa que permitiría la discriminación contra la comunidad LGBT».

De todas formas, parece que al tercer presidente norteamericano en obtener el Premio Nobel de la Paz durante su cargo, no le presta mucha atención a la campaña en su contra. En una entrevista concedida a la famosa revista gayOut, Obama llegó a inmiscuir a sus propias hijas en un discurso progresista que ha defendido varias veces frente al Congreso.

«Para Malia, Sasha y sus amigos —aseguró en esa ocasión el presidente—, la discriminación de cualquier forma en contra de alguien no tiene sentido. No se les pasa por la cabeza que los amigos que son gais o los padres de amigos que son parejas del mismo sexo deban ser tratados de manera diferente a los demás».

Y, aunque Obama alcanzó en su segundo mandato la ley federal que permite el casamiento legal de las parejas del mismo sexo, «la discriminación, la violencia, y la retórica homofóbica y transfóbica, todavía son problemas que confrontan los activistas LGBT de los Estados Unidos», sostuvo Michael Lavers.

No obstante, el primer presidente norteamericano que posó para una revista gay, el primer hombre negro en presidir el gran imperio, el primer dignatario de Estados Unidos en visitar Cuba después de la Revolución de enero de 1959, ya alcanzó derechos sexuales irreversibles para las personas LGBT de los Estados Unidos. Y, sin embargo, «ya hay más para hacer», ratifica Lavers.

(Tomado de Vanguardia)