El presidente Rafael Correa aseguró que Ecuador es un país totalmente cambiado, en el cual todos crecen y se cortaron las brechas entre ricos y pobres.

En conversatorio con medios de comunicación desde el Cantón Duran, en la provincia de Guayas, el mandatario señaló que la nación es un Estado en vías de desarrollo, pero todo lo avanzado 'ni un ciego del alma lo podría negar'.

Para ejemplificar los logros de los 10 años de revolución ciudadana, Correa precisó que a diferencia del período 1996-2006, cuando la economía acumuló un crecimiento de 85 por ciento, en la última década el incremento fue de 105 por ciento.

Aclaró que en ese período, el 10 por ciento más rico creció en un 112 por ciento, mientras los más pobres solo un 20 por ciento.

'Ahora todos han crecido, se han triplicado las utilidades empresariales. El 10 por ciento más pobre aumentó sus ingresos en un 112 por ciento y los más ricos crecieron un 40 por ciento. Las brechas se han acortado', insistió.

Sobre el desarrollo nacional, recalcó que dos millones de personas lograron salir de la pobreza durante su mandato y en ese sentido especificó: 'antes éramos de los tres países menos equitativos de América Latina y ahora somos uno de los menos inequitativos de la región'.

Además de ofrecer cifras que demuestran los logros alcanzados se refirió al cambio en temas de infraestructura en todo el territorio con la ejecución de vías, centros educativos y proyectos sanitarios, entre otros.

En ese sentido, insistió en que el 70 por ciento más pobre de la población no ha visto variar sus ingresos y el 30 por ciento con más posibilidades solo ha perdido 19 dólares de ingreso.

No obstante, aseveró que lo principal, el mayor avance, es el cambio de actitud del pueblo ecuatoriano, inmovilizado, desmoralizado, con una sociedad y familias colapsadas cuando comenzó su presidencia y ahora totalmente transformado.

Sobre la experiencia ecuatoriana, alertó que existen publicaciones internacionales en preparación, con estudios sobre todo lo avanzado y resuelto por el gobierno, sin necesidad de afectar a los más desposeídos.

'Hemos hecho el ajuste más grande de América Latina, pero sin perjudicar a los pobres', reiteró.

Rafael Correa concluirá su mandato el venidero 24 de mayo, cuando entregue la presidencia, después de 10 años de gestión, a su sucesor, electo por el pueblo en los comicios generales previstos el venidero domingo 19 de febrero. (Pensando Américas-Prensa Latina)