Los principales sindicatos y movimientos sociales de izquierda de Brasil convocaron para hoy un paro nacional contra las reformas económicas del gobierno de Michel Temer, el primero en este país desde 1996.

Los gobiernos de Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) y de Dilma Rousseff (2011-2016), ambos del Partido de los Trabajadores (PT), “con sus idas y venidas acabaron beneficiando a los trabajadores con varias políticas económicas y sociales”, y por ello no hubo huelgas generales en ese período, explicó la profesora de Sociología Paula Marcelino, de la Universidad de São Paulo.

El gobierno de Lula mantuvo una buena relación con los trabajadores, lo que contribuyó a que se registraran los mejores años de crecimiento económico.

Lula dejó la presidencia en 2010 con el PIB brasileño creciendo al 7,5%, y Rousseff tuvo relativa calma social en su primer mandato.

La última huelga general se produjo en Brasil en 1996, bajo el gobierno de Fernando Henrique Cardoso (1995-2002), del Partido de la Social Democracia Brasileña.

Los trabajadores protestaron el 21 de junio de ese año contra las privatizaciones, el desempleo y la flexibilización de los derechos laborales, y según los sindicatos, la protesta involucró a 12 millones de brasileños, el 19% de la población activa.

Ahora existe expectativa sobre cuál será la dimensión de la huelga contra Temer. Como antesala del paro de este viernes y en el marco de una creciente tensión social, el 15 de marzo se realizó una “jornada de movilización nacional” en contra de la reforma de pensiones de Temer. (Pensando Américas-Diario Cambio, de Bolivia)